SERIAL...WHAT?

Aviso a navegantes: este es un post indignado.



Todo empezó el día de la desaparición de una útil herramienta para estar al día de todas las
series (entre otras cosas) habidas y por haber. Ahí empezó mi desconexión del mundo seriéfilo, ahí y a mi torpez con la informática, no nos engañaremos. A eso se sumó la sustracción de mi queridísimo ordenador (nota para mi PC: allí donde estés  espero que hayas ardido o te hayas declarado en huelga al notar que ya no te tocan mis delicadas manos). Podría haber acabado aquí, sí, pero no, el afán por compartir piso conmigo misma y nadie más, me ha llevado a que no me llega ni para internet, así que mi única conexión con el mundo cibernético es a través del móvil, aunque mi abuela me insista constantemente que no es posible que tenga ordenador y no tenga internet.

Toda esta cadena de trabas, me llevó a ver series con cuentagotas, cuando alguien me las
pasa o tener que conformarme con lo que dan en TV. Y de ahí mi indignación y el sentimiento de culpa de que ayer, me fui a la cama mientras emitían Boardwalk Empire (¡maldito trabajo! ¿qué te he hecho yo para que me hagas madrugar tanto?). Todo empezó de maravilla, 21:30h, emisión de dos capítulos que terminan prudencialmente a las 23:30h (hora ideal si te levantas a las 6 de la mañana). Nada mejor para acabar el fin de semana y empezar el lunes con buen pie que una dosis de una fantástica serie, ambientada de maravilla y con grandes actuaciones. Tras un par de semanas, La Sexta, anuncia a bombo y platillo la emisión de nuevos capítulos de Pesadilla en la Cocina para los domingos a las 21:30h.

“Vaya... retrasarán Boardwalk Empire, pero bueno... por un día que “trasnoche” no va a pasar
nada”. Eso pensé, y desde luego no fue así.
Antes de proseguir, debo reconocer que no me desagrada el programa de Chicote (o tal vez es más el morbo de ver la asquerosidad a la que algunos llaman “restaurante”), aunque el gran
chef Gordon Ramsay me gustaba más.

Pues bien, tras un nuevo episodio de Pesadilla en la Cocina, esperaba ansiosa esa obra
maestra de la pequeña pantalla, pero... ¡Oh! ¡Sorpresa! ¡Emiten un capítulo repetido de
Pesadilla! Y la criatura televisiva de Scorsese se ve relegada a las 23h. Pero, no acaba aquí la cosa, no se emitieron dos capítulos, sino tres. Casi tres horas de trapicheos de Nucky
Thompson que me llevaron a dormir apenas 4 horas y a presentarme en el trabajo con mi
disfraz de oso panda.

Lo de ayer, fue aún peor. Atlantic City no apareció en pantalla hasta las 12h, tres capítulos otra
vez. Y como he comentado por ahí arriba, me fui a dormir pensando en que tramaría el amigo
Nucky esta vez.

Maltrato a Boardwalk Empire por parte de La Sexta, la cadena que se vende como “Serial
Lover”. Ya hace tiempo que hacen cosas similares (The Office, How I Met Your Mother, Extras, y algunas más que vivían relegadas a la madrugada), pero relegar esta fantástica película a
cámara lenta a horas intempestivas, es, lo que viene siendo en lenguaje callejero puro y duro,
una auténtica guarrada.

Firmado: Elisenda